el viernes me fui con ElPez a Bilbao, a una misteriosa cena que organizaban
unos amigos del tío este con que viajo... no me había dicho demasiadas cosas
de ellos, y estaba bastante intrigado
de camino al sitio de encuentro vi un cartel sospechoso
¿EPO? ¿como los ciclistas para aumentar el oxígeno en sangre? mmmm...
fue llegando la gente y me los fueron presentando, y me llevaron a cenar a
un sitio que se llama "la Taberna de los Mundos", cosa que a mí me encantó
por mi natural viajero... ahí estaban todos, ocho humanos -contando a ElPez-
y un peluche (luego fuimos dos): Cyrano, Burte, Cagliostro, Vader, Julius,
Gabriel ¿Solaris? y PeioLuí (con mil nombres en sus numerosos afanes en la
Red... me quedo con Gargantua porque soy lector apasionado de sus
poemas)
precisamente me encaré con él, intentando saber quién era El_Tubo, o
si realmente los Superiores Desconocidos tenían más encarnaciones de las
que nos temíamos, qué se cocía en unas y otras listas, en este lado y en
el otro de la blogosfera... pero sin resultado, porque se empeñó en decirme
que todo era una cuestión de endogamia blogalita, término que no acabé
de comprender (o que comprendí demasiado bien, por eso lo cuento aquí
en este rincón osuno de Blogalia)
pero supo ganar mi corazón porque me presentó a un nuevo compañero,
un canguro de colores llamativos que rápidamente encontró acomodo en el
bolsillo de ElPez; es un buen colega, y uno se acostumbra pronto a su
llamativa indumentaria
así que mientras los humanos hablaban de unas cosas y otras, (algunas
por cierto terribles, como no sé qué de un tal Vaticano que es homosexual
pero no deja casarse a sus novios, o algo así; o historias de blogs y listas
escépticas pero no tanto, de sirenas que escriben libros estropajosos o
de organizaciones que tienen que echar a andar... humanadas incomprensibles
vaya) nosotros nos dedicamos a planear viajes imposibles por la Tierra
Media
en esas estábamos cuando el canguro descubrió que en la carta de ese
restorán había ¡burger de canguro! y decidió esconderse en el bolsillo de
ElPez durante el resto de la noche; yo me aseguré que no se comía oso,
porque entonces les habría denunciado por arctófagos, pero aún así me
quedé con la mosca detrás de la oreja mientras los humanos no paraban
de hablar de extrañaas conspiraciones y contubernios
afortunadamente tuve tiempo de charlar con ellos y de sacarme unas
fotos también: pongo primero a Julio que como ahora es jefe de ElPez
se verá halagado (a pesar de su afable apariencia, me han contado cosas
terribles de él, como que logró dar al traste con unas elecciones en no sé
donde, pensé que era en Madrid, pero me explicaron que no, que ése era
Tamayo y tenía algo que ver con inmobiliarias... esto era más virtual)
el otro periodista de la mesa es un importantísimo pez gordo, que ahora
además cuentas sus historias en bitácoras como
Magonia ¿no había una guerra entre
el periodismo habitual y las bitácoras? yo ya no entiendo nada, porque además
Luis Vader llevaba un look como de haber abrazado una secta hinduista o
algo así
y había un friki del FreeBSD, que ejerce de escéptico y controla alguna
lista de correo con mano nada militar, por más que sea la bestia negra de
algunos estúpidos autocomplacientes... si no se habla de ordenadores con
Cagliostro, todo va bien, pero ahora que se ha puesto a jugar con el Mac
es realmente peligroso
en fin, no es raro que después de cenar decidieran todos ponerse a posar
delante de unas escaleras de esas de Foster del Metro de Bilbao, y más aún,
irse a un pub antediluviano a beber como cosacos... realmente era demasiado
para este relator de peluche; no entiendo, definitivamente, a estos humanos...